¿Es posible aprender y educarse mientras se juega? Por supuesto que sí, para eso podemos contar con la herramienta de Scratch.

Scratch es un lenguaje visual de programación centrado en fomentar la creatividad y el pensamiento lógico. Los niños son los principales destinatarios para Scratch. Enseñándoles a usar Scratch estamos ayudándoles a afrontar y resolver situaciones y problemas de todo tipo de una manera lógica y estructurada.

Podría considerarse el primer peldaño en la escalera de la programación informática. Scratch permite a los niños crear sus propios videojuegos y animaciones de una manera sencilla, introduciéndoles al mismo tiempo en el mundo y conceptos de la programación.

Cuando empezamos a enseñar a un niño a programar en Scratch el objetivo principal debería ser que vaya cogiendo soltura y asimilando conceptos, ideas básicas y flujos de trabajo sobre programación y pensamiento computacional de manera divertida y atrayente, para que se genere un interés y base técnica que le anime a seguir.

De manera sencilla podemos decir que Scratch es un lenguaje visual que basándose en bloques que se unen a modo de puzle, supone un modo sencillo de aprender sobre programación. Pero esa sencillez no debe ocultar que estamos ante un lenguaje también muy potente y que admite grandes proyectos que se pueden alcanzar de manera gradual.

Scratch propicia el desarrollo del pensamiento lógico a través de la búsqueda de diferentes soluciones a un problema. Programando, el niño es capaz de desarrollar su capacidad para ser más estructurado y organizado en la gestión de recursos y el uso de herramientas que le lleven a alcanzar la resolución de una tarea concreta.

Además, es un lenguaje divertido y que resulta atractivo desde el mismo momento en que se ponen delante de la pantalla. Los bloques de color y agrupados por funcionalidades se arrastran y sueltan para obtener un resultado inmediato. En el caso de los más pequeños, les permite crear movimientos, añadir sonidos, cambiar escenarios o crear juegos de manera sencilla, contribuyendo a su creatividad.

También es un gran aliado para que los alumnos con necesidades educativas se beneficien de un programa sencillo donde pueden realizar las tareas a su nivel y a con su propio ritmo, obteniendo un reconocimiento por ello.

Otro aspecto fundamental de Scratch es que potencia el trabajo colaborativo, favoreciendo la consecución de logros. El poder de trabajar con otros y expresar tus propias opiniones, genera confianza, conocimiento mutuo y crea vínculos que facilitan las relaciones sociales. Además, los conflictos también son abordados en grupo, lo que permite reflexionar y obtener recursos facilitando la prevención e identificación de situaciones adversas. Aprender de los errores, esforzase y ser perseverantes en el logro de los retos propuestos será una herramienta educativa de la máxima eficacia.

Beneficios de aprender Scratch:

– Desarrollo del pensamiento lógico

– Fomenta la imaginación y creatividad

– Mejora la habilidad de comprensión de los niño.

– Facilita el pensamiento sistemático.

– Mejora el rendimiento escolar

– Ayuda a la resolución de problemas

– Mejora la atención

– Fomenta el trabajo en equipo

– Ayuda a mejorar la confianza, seguridad en uno mismo y a tener una mayor autoestima.

– Apto para todo tipo de alumnos